miércoles, 13 de mayo de 2009

4 comentarios:

José Havel dijo...

Qué tiempos aquellos, los de Nacha Pop y de todo aquel burbujeo cultural que se produjo en España durante los 80...! Uy, hablo ya como lo hacía mi abuelo, rememorando batallitas. Un saludo, Arsenio.

Andrei Rublev dijo...

Estimado don José, si usted parece un abuelo, qué pareceré yo! En todo caso, me parecía obligado poner aquí a este muchacho triste, gran letrista (que es casi decir gran poeta), que se negaba a considerarse un maldito, ese tipo de zarandajas propias de los pagados de sí mismos y de los malos periodistas.
Un saludo.

Carmen Aliaga dijo...

Desde luego decir gran letrista es casi decir gran poeta. Aunque la letra no lo es todo en el poema, se podría decir que es el ingrediente principal...
Querido Arsenio, aunque no suelo colgar poemas cada día, a diario os leo y os pienso.
Muchos abrazos.

Andrei Rublev dijo...

Por añadidura, esta canción es pura poesía (clásica, por supuesto), surgida de un sufrimiento auténtico, de una ausencia real. De una vida, en definitiva, y no demasiado fácil, por cierto.
Sabéis de sobra, señora, que teneros aquí es un honor para esta alma cansada, que vuestra visita siempre es bienvenida, refrescante y atinada, y no hará falta recordaros que cantidad casa mal con calidad, que vuestros poemas están sobrados de esta última aunque tengamos que rogar al Cielo por la primera, por desvelar algo más a menudo los entresijos de vuestra alma.
Y a la mía llega certero el saber que me pensáis mejor aún que si me leéis, pues esto último remite a la vanidad (fruta para los necios) mientras que el pensamiento suele ser libre y puro si puro y libre es el espíritu que le otorga vuelo.
Agradecido quedo. Y conmovido, señora.